La Policía de Investigaciones logró incautar más de 7.000 kilos de cable de cobre robado desde instalaciones de la empresa CGE en distintas comunas de la región Metropolitana, en el marco de una diligencia realizada en los últimos días.
El robo de cables es uno de los principales problemas que enfrenta la distribuidora eléctrica, afectando tanto la calidad como la continuidad del servicio en comunas como El Bosque, La Pintana, Puente Alto y San Bernardo, entre otras.
La incautación equivale a un valor aproximado de 70 millones de pesos, sin considerar los costos adicionales de reposición de material, mano de obra y el restablecimiento del suministro.
Francisco Jaramillo, director regional centro de CGE, comentó que la diligencia revela la magnitud que tiene el robo de cables de cobre y como este delito impacta a la continuidad y calidad de servicio para los más de 550 mil clientes que tiene CGE en las 19 comunas de la región Metropolitana donde presta servicio de distribución eléctrica.
Según datos de la empresa, solo en el primer semestre de este año se registraron 608 episodios de robo de cable en su zona de concesión, desde Arica a La Araucanía, totalizando más de 171 mil metros de conductor sustraído.
En la región Metropolitana, los incidentes se han multiplicado por diez respecto del año pasado.
Desde CGE hicieron un llamado a la ciudadanía a denunciar hechos sospechosos, como personas sin identificación operando redes eléctricas en horarios poco habituales.