A partir del próximo miércoles 13 de agosto entrará en vigencia la nueva normativa que obliga a las empresas a utilizar prefijos telefónicos determinados para las llamadas comerciales, con el objetivo de que los usuarios puedan identificar de forma inmediata si se trata de comunicaciones masivas, solicitadas o no solicitadas, y así evitar posibles fraudes o estafas.
Según informó el gobierno, la medida busca entregar mayor certeza y transparencia, diferenciando claramente el tipo de comunicación. Para ello se han establecido dos prefijos exclusivos:
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809 para llamadas masivas con fines publicitarios no solicitadas.
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600 para comunicaciones con fines publicitarios solicitadas o aceptadas mediante contrato de servicio.
La normativa prohíbe a las empresas utilizar cualquier otro tipo de numeración para contactar a usuarios o potenciales clientes a través de llamadas masivas y/o automatizadas.
Desde la Subsecretaría de Telecomunicaciones recordaron que, si una persona recibe una llamada con fines informativos o publicitarios que no utilice los prefijos definidos, podrá realizar un reclamo a través de este enlace.