El Tribunal Oral en lo Penal de San Antonio dictó la pena de presidio perpetuo calificado, sin acceso a beneficios carcelarios, contra un hombre de 41 años, declarado culpable de múltiples delitos sexuales cometidos contra dos menores de edad y una mujer adulta.
La investigación, liderada por la Brigada de Delitos Sexuales (Brisex) de la Policía de Investigaciones, permitió establecer que el acusado perpetró violaciones y abusos reiterados en contra de sus dos hijastras, una de ellas con diagnóstico de Trastorno del Espectro Autista (TEA), además de un ataque sexual contra una tía de las menores.
El caso salió a la luz en 2020, cuando una mujer adulta se presentó en una unidad de Carabineros para denunciar una agresión sexual sufrida años atrás.
Su testimonio fue clave para abrir una indagatoria que reveló una serie de hechos de extrema gravedad que afectaron a sus sobrinas durante un prolongado periodo.
Tras el juicio oral, el tribunal consideró acreditados los delitos y calificó al condenado como un agresor sexual de alta peligrosidad, dada la reiteración de los hechos y el vínculo de cercanía con las víctimas.