Tras la última sesión del Concejo Municipal de Melipilla, algunos ediles manifestaron su preocupación por el manejo de la seguridad comunal y revelaron que seis de ocho concejales estaban de acuerdo para solicitar la salida del director Guillermo Villagra
Tras la sesión del Concejo Municipal, varios ediles expresaron su inquietud frente al aumento de episodios de violencia escolar, intensificada tras el trágico asesinato del joven en plena Plaza de Armas.
El concejal Víctor Loyola se refirió al debate interno que se generó durante una reunión que sostuvieron los concejales el pesado domingo tras los hechos del viernes. Reveló que seis de los ocho concejales estaban a favor de solicitar la remoción del director de Seguridad Pública municipal, Guillermo Villar.
No obstante, dicha solicitud no prosperó, según indicó, debido a decisiones políticas adoptadas por partidos del oficialismo.
Por su parte, la concejala Paola Palacios insistió en la necesidad de reestructurar y profesionalizar la Dirección de Seguridad Pública. Afirmó que, frente a un hecho de esta magnitud, lo más esperable habría sido la renuncia del director —quien actualmente enfrenta un sumario administrativo—, argumentando que la unidad no cuenta con un plan de acción efectivo para responder a este tipo de situaciones.
Por otro lado, el concejal, José Luis Cabión si bien no abordó puntualmente la situación del director de Seguridad Pública, manifestó su profundo pesar por lo ocurrido y propuso retomar iniciativas preventivas dirigidas a jóvenes en ese mismo espacio público, en coordinación con la Oficina de Deportes.
Según explicó, estas actividades pueden contribuir a crear entornos más seguros y de contención. Además, valoró la disposición de la alcaldesa a respaldar todas las acciones orientadas a reforzar la prevención de la violencia en la comuna.
Las intervenciones de los concejales evidenciaron la creciente preocupación de la comunidad frente a la seguridad y la convivencia escolar, subrayando la urgencia de mejorar la coordinación institucional y avanzar en políticas preventivas más eficaces que brinden mayor tranquilidad a las familias melipillanas.